"A las drogas di que no". (2º Premio Concurso Literario 2016-2017)
Autora: Zaira Mª Rey (IES Fraga do Eume)
Me llamo Jonnathan y os voy a contar mi historia desde mi infancia.
Yo era un niño cariñoso y dulce al que lo único que le importaban eran los pensamientos de su familia y amigos; mi familia era honrada y trabajadora aunque por vivir donde vivíamos y no tener mucho dinero nos criticaban y por eso solo podía tener amigos del mismo barrio que yo; a diferencia de mi prima yo vivía a las afueras de la ciudad, en el barrio de La Cruz, donde lo que se solía ver era droga por cada rincón oscuro o en la noche.
Mi prima vivía en el centro de la ciudad y su clase social era mucho más elevada que la mía, ya que sus padres tenían muy buenos trabajos y ganaban mucho dinero; Nathaly tenía miles de amigos y su novio era un motero, 3 años mayor que ella.
Todo era como una película en la vida de mi prima; todos la querían y la tenian como ejemplo a seguir, tanto en sus estudios como en su personalidad; una niña cariñosa, con buenas notas y que ayudaba a todo el mundo, a la que nunca le faltaba de nada.
Yo, sin embargo, cada cosa que quería, me la ganaba vendiendo lo que no utilizaba, ahorrando, etc.
Todo lo bueno lo tenía mi prima, hasta el día en que tuvo un accidente de coche con mis tíos (sus padres).
Nathaly estuvo dos días en coma y lo único que le diagnosticaron eran heridas leves; al despertar del coma, los médicos tuvieron que darle la trágica noticia de que sus padres habían fallecido.
Físicamente se recuperó, pero después de haber perdido a sus padres, sus amistades y su clase social se desvanecieron al igual que sus riquezas; su novio la dejó por su mejor amiga y eso hizo que permaneciera durante muchos meses en una gran depresión.
Ella se vino a vivir a mi casa con mis padres, con nuestra abuela y conmigo; todos estábamos destrozados, aunque ella se tuvo que adaptar a ser criticada por vivir en mi barrio y la insultaban por no poder llevar ropa de marca como antes acostumbraba poner.
Al acabar el primer verano en mi casa, se trasladó a mi instituto y todas las niñas la despreciaban por parecerle guapa a sus novios.
Como veía que Nathaly estaba siempre sola, le presenté a mis amigos del instituto Jenny y Kevin. Ellos eran fumadores por aquel entonces y mi prima y yo empezamos a fumar y a salir con ellos, sobre todo por las tardes, a una casa en ruinas.
Nos sentíamos los dos muy bien con nuestra pandilla, pero llegaron las críticas de los pijos del centro; siempre estaban insultandonos y diciendo que éramos inferiores a ellos, por el simple hecho de fumar y pasar tiempo en una casa, por lo que Abraham, el novio de mi prima, no resistió más críticas y apuñaló a dos chavales y se fue a un centro de menores y nunca volvimos a saber nada de él.
Después de todo ese mal trago, mi prima empeoró psicológicamente y empezó a fumar porros, con los colegas y yo era el único que no fumaba, hasta que me dijeron que si no fumaba me iba a quedar solo sin amigos, entonces decidí probar los porros y después de un tiempo fumándolos, me enganché. Y en ese momento no hubo vuelta atrás, mi abuela había fallecido y desde entonces, no volví a ser el mismo.
Entre todos los del grupo ocupamos un piso, en el que solo estábamos Kevin, Jenny, Nathaly y yo; entonces llegó un momento en el que mis padres se cansaron de intentar hacernos ver la realidad por nuestro bien y decidimos no volver a hablar con ellos.
Nathaly y Jenny se pusieron a trabajar en un club para ganar dinero, mientras que Kevin y yo vendíamos droga. Empezamos a probar nuestra mercancía.
Teníamos las que solían comprar adolescentes y gente joven, como marihuana y hachís. Después esas se les hacían sencillas y aburridas a los chavales y compraban benzodiazepinas, LDS, cocaína, MD, …
Llegó un día que nos pillaron y nos enchironaron. Mi prima se quedó embarazada y perdió su trabajo y a Jenny, la violaron de camino a casa a las 7 de la mañana y después de esto la asesinaron.
Como mi prima se vio sola con el niño que venía en camino, decidió robar un bar del que obtuvo bebidas alcohólicas y con el dinero de la caja compró heroína, que era la droga que consumía habitualmente.
Después de consumir estas drogas, tuvo una sobredosis y su cuerpo ya no pudo soportar más y esa sobredosis fue su fin para ella y su futuro hijo. Ella hizo que su último día se aproximara y me escribió una carta que decía:
"He hecho lo peor, por no pensar las cosas bien y hacerle caso a los tíos, ellos sí que tenían razón y nosotros no teníamos todo tan controlado Jonny...
Quiero que tú cuides de Kevin y que los dos salgáis adelante y que, sobre todo, cuides de ti. Me vi muy sola en este mundo y decidí robar un bar para irme junto con mis papás y los abuelos.
Piensa dos veces las cosas, Jonnathan, que yo desde donde quiera que esté, voy a ayudarte a salir de esta asquerosidad que nos dio buenos momentos, solo que demasiados malos, primo...Cuídate y no te olvides de esto que escribo, recapacita ahí, aunque sea solo por mí."
Esa carta me hizo ver que tenía que salir adelante, pero Kevin estaba enamorado de Nathaly y al enterarse de lo que había pasado, se suicidó aquí y me quedé yo solo, pero mis padres me ayudaron cuando salí de prisión, aun después de todo lo que les hice sentir.
Al salir de prisión volví a nacer, solo con mis padres y superando las muertes de todos mis amigos y de mi prima, al principio todo era duro y nunca olvidaré estos 24 años perdidos por culpa de las drogas. Empecé a escribir todo lo que me había sucedido con la intención de ayudar a chavales ya desde su adolescencia y creo que más de uno me ha dado las gracias, y esto es simplemente un resumen de mi vida.